domingo, 10 de enero de 2016

La Buena Soledad

Los momentos de soledad son para disfrutarlos. Y me refiero a los momentos de soledad de los buenos, no de esos que aún rodeados de gente te sientes solo, porque esos proceden de un sentimiento de desencaje, de no encontrarte en el momento ni en el lugar que realmente quieres estar, ni con las personas que deseas; puede servirte como experiencia de superación, pero no es algo disfrutable en el instante. Pero los momentos de buena soledad son aquellos, que después de haber disfrutado de tus amigos, familia, personas, sabes saborear con un regustillo de felicidad. Y poder sentirte completo en ese estado un tiempo indefinido, corto, largo o todo lo contrario. 

Es un momento complicado de encontrar, a veces el mundo no nos deja, otras veces huimos de él con un miedo inconsciente a encontrarnos con nosotros mismos, a hacernos preguntas incómodas que preferimos no conocer, o un miedo consciente de “pérdida de tiempo”, miedo a esos malditos “Hombres Grises” que alimentan tu idea de falta de tiempo, robándote el tiempo de sentir lo que vives.